El menú del día es un motivo más que suficiente para que conviertas la restaurante Can Coca en tu segundo hogar. Sus Raviolis rellenos de calabaza con salsa de quesos y cebolla caramelizada, los Spaghetti al pesto rojo y mortadela de Bolonia y la Tostada con surtido de patés y cebolla caramelizada son una buena manera de empezar, mientras que las Tiras de pollo al curry con leche de coco, el Tartar de atún y aguacate y los Escalopines de pollo al vino blanco representan su idea culinaria entre los platos principales.
Y no solo para comer. El restaurante Can Coca es también una óptima alternativa para empezar bien el día. Sus ricos desayunos tienen la culpa. ¿A qué esperas para probarlo?